Cambio de aires, en esta ocasión dejé las aguas de la Costa Brava para ir a tentar las lubinas del Ebro. Entorno completamente diferente y una pesca que me recuerda a la del black bass. Algas, arboles, pilares... son sitios en los que se pondrá la lubina y nosotros tendremos que saber poner los señuelos en su radio de acción.
Tanto por la tarde del miércoles como por la mañana del jueves salieron algunos ejemplares, que sin ser grandes ya nos regalaron de una bonita y divertida jornada de pesca.
Picadas por reacción, el Swimming Senko Elite 4.5" de Yamamoto movido con golpes de muñeca enérgicos fue la clave para conseguir picadas. Y una vez más este señuelo que tan buenos resultados me está dando en el mar demostró que en aguas interiores también funciona a la perfección. El Elite de 4.5" tiene la ventaja sobre sus hermanos de 4 y 5" que es un poco más grueso, lo que nos facilita su montaje con grandes y pesadas cabezas plomadas además de tener un poco más de aguante a las mordeduras, aspecto muy interesante si pescamos en el mar.
Una vez dimos con el señuelo y la acción requerida para levantar las lubinas la frecuencia de picadas aumento. Días así te hacen dar cuenta de la importancia de probar señuelos y acciones diferentes en una misma jornada de pesca, ya que un pequeño cambio puede representar que la jornada pase de ser un fracaso a ser un éxito.
Hasta pronto lubinas del Ebro!
Enhorabuena, eres un máquina.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias Jonathan! son muchas horas tras las cañas!
EliminarSaludos
Felicidades por las jornadas echadas, y por el disfrute de las capturas.
ResponderEliminarBuen señuelo ese si señor.
Saludos.
bonita jornada en el delta, noraboa
ResponderEliminarBonita lubina Josep
ResponderEliminarSaludos
Alex